domingo, julio 31, 2005

Crímenes cometidos (No mato una mosca pero muchas me rondan a mí)

A veces los tiempos y los espacios prefieren no encontrarse y no hay nada que uno pueda hacer para remediarlo.

Ante la lejanía o el destiempo (la lejanía y el destiempo) es reconfortante mirarse el vientre y ver que no hay ahí ninguna cicatriz.


...
...
...
...




A este post se lo comieron las moscas.


Pronto: a Zapotlán el grande también.

jueves, julio 21, 2005

No es que muera de amor, muero de ti

¿Sabines ya no está en onda?


¿Todavía se dice "onda"?







Soy una dama sin modernidad.

viernes, julio 15, 2005

El teatro de la crueldad

Decir "aquí estoy, ya no estoy, aquí estoy, ya no estoy, aquí estoy, ya no estoy...", y así hasta el infinito, es una crueldad. Lo malo es que uno no puede plantar a mitad de la secuencia la frase "Por fin ¿estás o no estás? Definete ahora." porque no se sabe qué pasara si de verdad lo hacemos parar. Nos gusta lo definitivo, pero aquí la indefinición es una definición: sabemos lo que somos, somos inestables.

Decir "te amo" es tan sencillo como decir "te odio". Ambas sentencias son una crueldad. Uno se cree lo dicho, se enfrasca en la labor de corresponder el sentimiento y entonces resulta que no, que era un decir como cualquier cosa. Podría no creerse en nada, pero se volvería todo confuso, pues decir "Hola" quizá quiera decir "Adiós", esto "Te espero", y esto otro "Estorbas, déjame pasar". Imposible cerrar la boca y enrollar la lengua. El gusto por hablar mata la importancia y el sentido de lo que se va a decir.

Sentarse a esperar que la vida se ponga linda es una crueldad. La belleza que se aguarda, lo aseguro, tomará una ruta distinta.

Andar correteando las posibilidades es una crueldad. Son inalcanzables. No es que sean rápidas, están en el punto justo de la cola para el hocico del perro: constantemente detrás de ella y la distancia siempre se conserva intacta.

Otros ejemplos en el mismo tema: dedicarse a la pesca, talar árboles y cortarle los bigotes a un gato para ver cómo pierde el equilibrio.

La tarea es escoger un personaje y luego interpretarlo. No es especialmente brillante elegir hacer las veces del espectador. El que observa será observado observando. En cualquier momento, el personaje que contempla al que contempla la obra podría lanzar una botella hacia el frente y crear en el que decidió ser espectador una herida por la que se desangrará en la mullida banca desde la que pensó que todo sería comodidad.

A final de cuentas no es gran drama. El histrionismo salva.

* * *

Mira el reloj y se pregunta: "¿Falta mucho para que termine?"

...Lo siento tanto, el tiempo de esta obra es circular.

jueves, julio 07, 2005

Farewell, my love




En los ojos del que vuelve, siempre, las cosas cambian.
(Oscar Cid de León)


* * *

Cuánto desorden, carajo. Voy a barrer un poquito a ver si después sale mejor lo que quería decir. (A barrer las sombras, claro. No queremos tener testigos.)

* * *

A todo el que se vaya le deseo bonanza y felicidad en su viaje. Póngale plásticos encima a sus sombras, no se le vayan a empolvar en la espera.

* * *

Cuando uno se va no debe volver sino hasta pasado mucho tiempo, para que los recuerdos no engañen y luego sea todo desilusión. Eso lo dicen re bonito en Cinema paradiso, pero aquí no me salió bien. Si ya decía yo que tengo que barrer primero.

* * *

¿Que este post no tiene sentido? Oh, sí que lo tiene. Usted no sabe nada de nada.


* * *

martes, julio 05, 2005

Ley de causa y efecto

El kinder donde aprendí a hacer banderas de México con bolitas de papel de china y el escudo calcado de una moneda de mil pesos se llamaba Villa infantil. * La entrada era la boca de un payaso, los botes de basura tenían forma de payaso, todo el lugar estaba decorado con motivos de payaso. Creo que ahí fue donde comenzó todo.

En la primaria, para avisarnos que faltaba poco para que comenzaran las clases, en lugar de poner el himno nacional o la marcha de Zacatecas nos ponían Like a prayer de Madonna. * El recuerdo más remoto que tengo de una mariposa negra fue en el primer año: yo sentada entre Miguel y Zaira, enfrente el maestro Noel cantando para nosotros "tiwnkle twinkle little star...", volteo hacia arriba y veo la mariposa grandota y negra pegada en el techo justo encima de mí, sin más explicación salgo corriendo del salón. Creo que ahí fue donde comenzó todo.

En la secundaria llevábamos materias como "cuidado y conservación de la casa" y "cuidado y conservación de la ropa". Una de las actividades extra-escolares que nos ofrecían como opción era ir a visitar a enfermos terminales y decirle a cada uno: "Oiga, ¿usté es católico? porque aquí le traigo una estampita del Beato José María Escrivá para que le ofrezca usté su sufrimiento." * La primera amiga por conveniencia que tuve fue Paulina. A Paulina la corrieron en segundo porque era una jovencita muy violenta y golpeaba personas por puro placer. Yo le caía bien. Era su amiga porque eso me ponía a salvo. Creo que ahí fue donde comenzó todo.

La prepa era horrible. Las clases eran horribles, los maestros eran horribles y los alumnos eran horribles. En la pared del patio estaba pintada una cara enorme de Don Bosco y la sentencia "Quiero verte siempre alegre". Afuera siempre olía a orines. * Creo que ahí fue donde comenzó todo. * O donde se estancó. * O no sé.

Efecto: estas ruinas que ves.